Pues sí, yo tampoco me lo creía hasta que me lo demostró un chapista. Límpias previamente la zona; que no tenga polvo, suciedad, etc... Con un paño, servilleta de papel, papel celulosa o similar mojas un poco de líquido de frenos, lo extiendes por la supierficie a tratar; finalmente vuelves a limpiar la zona con otro papel limpio de modo que no quede líquido de frenos.
Es como el Hemoal pero para los arañazos.
Como te digo vale para arañazos leves (que no se vea lo balnco de debajo de la pintura). Por ejemplo, te vale por si has rozado el coche con broza en el campo, o si te lo ha rozado una paersona al pasar junto a él,. etc...
Preueba en una zona que no se vea mucho, por si no te fías y comprueba.
Saludos